Contraindicaciones, precauciones y reacciones adversas
Solo está contraindicada su utilización en personas que tengan un trastorno neurológico de la conexión neuromuscular denominado: síndrome miasténico (Eaton-Lambert) o miastenia gravis porque podría agravar sus síntomas. Debe tenerse precaución también en otras enfermedades neurológicas que afectan a nervios periféricos o músculos como la esclerosis lateral amiotrófica y al inyectar en los párpados en casos de glaucoma de ángulo cerrado. También en cualquier proceso que afecte a la deglución.
La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) ha emitido un comunicado donde se informa que: "El grupo de trabajo de Farmacovigilancia (PhVWP) de la Agencia Europea de Medicamentos (EMEA) han revisado los datos disponibles sobre el riesgo de aparición de efectos adversos graves debidos a la diseminación de la toxina botulínica. Se han notificado casos graves de debilidad muscular, disfagia o neumonía por aspiración, supuestamente relacionados con la diseminación de la toxina botulínica tras el uso de medicamentos que la contienen. Algunos casos tuvieron un desenlace mortal. Hasta el momento en el Sistema Español de Famacovigilancia se han recibido 12 notificaciones de casos graves relacionados con medicamentos que contienen toxina botulínica. Ocho de estos pacientes tuvieron uno o varios de los siguientes síntomas relacionados con la diseminación de la toxina: disfagia (5), debilidad muscular (6) y neumonía (2). Del total de casos graves seis ocurrieron en niños menos de 13 años, uno de ellos tuvo un desenlace mortal".
Como puede leerse el riesgo es muy infrecuente pero recomienda lo siguiente:
-Los medicamentos a base de toxina botulínica sólo deben ser administrados por médicos con la experiencia suficiente, incluyendo el uso del equipo necesario.
-Debe informarse a los pacientes o a sus cuidadores sobre el riesgo de diseminación de la toxina y advertirles que soliciten asistencia médica de inmediato si aparecen trastornos respiratorios, del habla o de la deglución.
-Las unidades de toxina botulínica no son intercambiables entre los distingos medicamentos.
-Deben seguirse las técnicas de administración recomendadas y las instrucciones posológicas específicas de cada medicamento e indicación (incluida la recomendación de usar la dosis mínima eficaz y la de ajustarla teniendo en cuenta las necesidades individuales).
Evidentemente tampoco puede utilizarse en al érgicos conocidos a esta neurotoxina. A pesar de todo y aunque muy raramente podría producirse una reacción anafiláctica por lo que se debe estar preparado para esta eventualidad.
No se recomienda el uso de la toxina botulínica en embarazadas y en la lactancia. Tampoco debe utilizarse en tejidos inflamados o infectados. No se producen interacciones con otros fármacos.
Puede también producir pequeños hematomas en el punto de inyección. Cuando se producen suelen ser localizadas a los pocos días de la inyección, en general debidas a mayor debilidad en algún músculo inyectado o de su vecindad. También se han descrito: dolor localizado, dolor de cabeza, sindrome gripal, ptosis, queratitis, lagoftalmos, irritación ocular, fotofobia, disfagia, sequedad de boca, infección respiratoria. Los efectos, tanto beneficiosos como adversos son de naturaleza transitoria y desaparece en semanas. No obstante, consulte siempre con su médico antes de ponerse toxina botulínica.
