Belleza

Desde hace muchos años, algunos neurólogos, conocemos y venimos aplicando la toxina botulínica en múltiples patologías que afectan a los músculos, directa o indirectamente, de cualquier parte del cuerpo. Para su utilización se necesita cierto adiestramiento en su preparación, dosis a utilizar y puntos donde debe infiltrarse. Existen cursos y congresos médicos específicos para conocer y capacitarse en este tipo de tratamiento.

Pero también la toxina botulínica es muy útil en indicaciones no musculares: controla y disminuye la sudoración excesiva en cualquier zona del cuerpo: axilas, manos, etc. Además también disminuye la salivación excesiva de personas que pueden “babear” de forma incontrolada por: tratamientos con tranquilizantes; enfermos de Parkinson o de Alzheimer, etc. Se dispone de amplia experiencia en el Mundo (Comunicaciones y trabajos científicos) aunque en ficha técnica del producto no están indicados estos procesos.

La toxina botulínica tiene como característica especial que puede usarse en una gran variedad de procesos de contracción exagerada que afecten al músculo (con o sin dolor): blefaroespasmos (cierre involuntario de párpados; guiños y tics faciales); distonías cervicales (tortícolis) y en miembros; bruxismo (cierre mandibular involuntario con rechinar de dientes); contracturas cervicales crónicas (síndrome del “latigazo” del accidente de tráfico); dolor crónico muscular (dolor de cabeza crónico y algunas migrañas; fibromialgia); espasticidad y rigidez del músculo (hemiplejia por trombosis cerebral, esclerosis múltiple, etc.). Aunque no todas estas patologías están indicadas en la ficha técnica de los productos comerciales con toxina botulinica en España.

Este efecto sobre los músculos, es el que mejora también las arrugas de expresión de la cara. Así se puso de moda en Estados Unidos (mas de un millón en el año 2002) como un excelente tratamiento para las arrugas. Desde el año 2004 se ha autorizado esta indicación en España en hospitales y clínicas autorizadas y por médicos expertos.

El descubrimiento que ha suscitado mas interés social ha sido su gran utilidad estética para corregir las arrugas de expresión facial sin necesidad de cirugía. Aunque en la mayoría de los trabajos científicos y en muchas clínicas en medicina estética se ha usado para las arrugas de "las patas de gallo" en el borde externo de las órbitas y en las arrugas de la frente horizontales, en ficha técnica del producto, solo se autoriza su uso en arrugas del entrecejo o glabelares. El tratamiento se realiza en la consulta externa, no necesita preparación previa ni posterior y los resultados que se obtienen, en general y en pocos días, son muy satisfactorios produciendo una imagen rejuvenecedora del rostro (que algunos han calculado de unos 10 años).

¿Cómo funciona? En los músculos relaja su contracción de forma muy duradera (4 meses) y en las glándulas sudoríparas y salivares bloquea su secreción incluso durante mas meses.

En el caso de las arrugas, esto no es un material de relleno. Simplemente el producto relaja determinados músculos de la cara y retrasa la formación de las arrugas de expresión que se van formando con el paso de los años (entrecejo) sin cambiar la expresión natural de la cara, mejorando y manteniendo el aspecto joven del rostro. De ahí que interese ponerla en personas relativamente jóvenes (treinta – cuarenta años) aunque también es efectiva en personas de mayor edad (máximo 65 años).

En el caso de la sudoración excesiva o hiperhidrosis (manos, axilas, etc.) la toxina bloquea temporalmente la transmisión nerviosa a las glándulas sudoríparas de la piel allí donde se inyecta y disminuye la secreción del sudor. La hiperhidrosis tiene, a veces, importantes consecuencia sociales y este es el mejor tratamiento médico actual que existe, aunque también hay tratamientos quirúrgicos con riesgos importantes.

¿Cómo se utiliza y cuanto dura? Con una aguja muy fina se inyecta bajo la piel dosis muy bajas del producto en las zonas a tratar, en la cara para las arrugas y en axilas para la hiperhidrosis. No es necesario ninguna preparación previa y se realiza en la consulta de forma ambulatoria. Es muy eficaz, su efecto se nota a los pocos días y dura varios meses (en arrugas 4 meses y en hiperhidrosis entre 6 y 10 meses) por eso se recomienda, al menos, dos sesiones al año. No hay límite de tiempo para seguir poniéndose el producto. Se calcula que el aspecto del rostro se puede rejuvenecer en unos diez años y la mejoría de la sudoración puede alcanzar el 90%. Para el resto de las indicaciones, son inyecciones musculares cuya localización y dosis dependerá del proceso a tratar por el especialista.

¿Qué efectos secundarios puede tener? El tratamiento es bastante seguro por la rareza de efectos secundarios graves. Normalmente no tiene efectos desagradables importantes y puede hacerse vida normal o acudir al trabajo inmediatamente tras las inyecciones. En algunos casos puede producirse un pequeño "morado" (hematoma) en el punto de la inyección y desaparece en pocos días. Por otro lado, tiene la ventaja que no produce problemas irreversibles. Pero hay que tener en cuenta que el tratamiento debe hacerlo un médico y este tiene que ser experto. Se han descrito, en casos excepcionales, cuando se usan dosis grandes (mucho mayores que en estética), sobretodo en procesos neurológicos de músculos grandes o del cuello o en niños, debilidad muscular a distancia que puede dar dificultad transitoria para tragar (disfagia) (ver el apartado en esta web sobre contraindicaciones y reacciones adversas).

¿Es muy caro el tratamiento? Los resultados son muy prolongados (varios meses) por lo que el gasto es menor (solo dos o tres veces al año). Para el caso de las arrugas de expresión es mucho menos caro que la cirugía u otros procedimientos estéticos mas agresivos y lógicamente se puede ahorrar en cosméticos. Además actualmente los precios están mas ajustados. No debe repetirse el tratamiento antes de tres meses para evitar que el organismo genere defensas contra la toxina y deje de funcionar pero, respetando este margen, puede utilizarse durante muchos años sin que disminuya su eficacia.